Ejemplo de justificación-Juego dramático

Éste es un modelo de justificación. Trabajo de Yessica Ospina.

Solicitud de inclusión del “Juego Dramático” en el currículo escolar

Señor rector de la institución:
Asunto: Justificación de inclusión del “Juego Dramático” en el currículo de formación Infantil


Reciba un cordial saludo, me dirijo a usted planteando la necesidad de incluir actividades relacionadas con el juego dramático en el currículo de formación infantil. Los niños en su rol de estudiantes tienen una vida cotidiana y cada experiencia en el aula complementa su madurez.

El mayor tiempo que un niño pasa durante el día es en el colegio, compartiendo experiencias y emociones que permiten su crecimiento como ser social en nuestra sociedad. Es por eso que las aulas de clase no pueden ser solamente espacios con ladrillos, que están destinados a encerrar al niño para que consuma una serie de conocimientos, sino por el contrario debe ser un escenario en el cual el niño a través de su rol comprenda y aprenda de la vida con actividades tales como el juego. Por ello sugiero una actividad que a largo plazo fortalecerá dichas falencias y permitirá el perfeccionamiento de habilidades comunicativas y expresivas que permitan su desarrollo intelectual y personal.

Es sabido que los niños cuentan con una creatividad y una imaginación desbordante, por lo cual parece provechoso estimular estas capacidades, con el fin de permitirles interactuar con su mundo exterior y con ellos mismos, a través del “juego”, un medio que en ellos es natural y complaciente. El juego dramático, será la fuente que posibilitará dicho fortalecimiento, ya que la dramatización unida al juego facilitará que ellos representen su realidad, y  el concepto que tienen de ella de una forma natural y espontánea, dejando que expresen efectivamente su visión de mundo, ayudados por un ordenamiento que no establecerá reglas ni propiciará un ambiente de limitación sino de respeto y diversidad de manifestaciones.

Como lo afirma Tejerina en su texto,  El juego dramático en la educación primaria[1], “Este juego creador ejercerá su positiva influencia en aspectos cognitivos, lingüísticos, afectivos y sociales y ellos lo acogerán gozosos porque es fundamental para su crecimiento en armonía y en libertad”. El juego dramático no sólo ayuda a desarrollar habilidades cognitivas, afectivas, etc., sino que refuerza y mejora la comunicación con quienes los rodean, y por ende, tendrán un vínculo social más fluido, como lo refleja Juan Cervera[2], “Dentro del panorama educativo es sabido que a la dramatización se le atribuyen otros objetivos como favorecer la comunicación”.
Para que el juego dramático se dé satisfactoriamente, es necesario tener en cuenta ciertas pautas que no limitarán la imaginación y creatividad de los niños, sino que le darán un orden a la actividad presente. (El juego debe ser placentero, gratificante y libre, sin embargo para evitar  inconvenientes lo principal es inducir a los niños al respeto y a la tolerancia).

Mi deber como docente es brindarles una formación integral, además del conocimiento supuesto que debo transmitirles, y sé con seguridad que el juego dramático, propiciará en ellos la integridad aportándoles valores y principios que enriquezcan su formación y aumenten su autoestima. Mi intención, no es involucrarlos con el teatro, en su lugar deseo entregarles la posibilidad de explorar sus capacidades mediante el mencionado juego dramático que a diferencia del arte teatral, no necesita de espectadores ni de críticas sobre sus disciplinas rigurosas para llevarse a cabo, nuevamente como lo menciona Cervera  “pese a lo genérico de la expresión, empleamos aquí juego dramático para designar la actividad lúdica a que los niños se dedican colectivamente para reproducir acciones que les son tan conocidas que las convierten en la trama de su juego”.

En conclusión, solicito su apoyo y respaldo para incluir en el plan de estudios el tan recurrido juego dramático, con el objetivo claro de fomentar en las aulas, espacios de aprendizaje y enseñanza amenos, significativos y ciertamente enriquecedores para la vida de nuestros niños.




Cordialmente,



Yessica Alexandra Ospina Espinal
Candidata a Licenciada en Español y Literatura
Universidad del Quindío


[1] “El juego dramático en la Educación Primaria”, Textos de Didáctica de la Lengua y la Literatura, nº 19, Monografía Teatro y juego dramático, Enero 1999, pp. 33-90
[2] Cervera, Juan. (1981), G.d Cincel. Madrid. “Cómo practicar la dramatización con niños de cuatro a catorce años”.